Descripción del Objetivo: Esta ponencia tiene como objetivo presentar diversos principios y
estrategias de diseño hospitalario que influyen positivamente en la percepción y
recuperación del paciente. Exploraremos cómo los elementos arquitectónicos y de diseño
pueden crear entornos sanadores, mejorar la satisfacción del paciente y acelerar su proceso
de recuperación. Se discutirán ejemplos prácticos y estudios de caso que demuestran la
efectividad de estos enfoques innovadores en la creación de espacios que curan.
La eficacia de un centro de salud depende no solo de la rapidez de los procedimientos
médicos, sino también de la percepción y la experiencia positiva de los pacientes durante su
estancia. Comprender y abordar las necesidades de los usuarios en el diseño puede ser un
catalizador para una recuperación más eficaz. Es común que las quejas de los usuarios
estén ligadas al espacio. Factores como la privacidad, la comodidad, la orientación espacial
y la estética ambiental pueden influir en la experiencia y la recuperación del paciente,
según un estudio publicado en Health Environments Research & Design Journal.
Por otro lado, un estudio realizado por The Center for Health Design en 2018 encontró
que:
90% de los pacientes reportaron que el diseño físico del entorno hospitalario afecta
su nivel de estrés y ansiedad.
● 77% de los pacientes indicaron que la calidad del entorno físico del hospital influyó
significativamente en su satisfacción general con la atención recibida.
● 69% de los pacientes mencionaron que un entorno hospitalario bien diseñado mejoró
su percepción de la calidad del cuidado y su bienestar durante la estancia
hospitalaria.
● 82% de los pacientes prefieren habitaciones privadas bien iluminadas y con vistas a
la naturaleza, ya que estos factores contribuyen positivamente a su recuperación.
El diseño influye en la eficiencia operativa y en el bienestar del personal de salud. También,
tiene un impacto profundo en la percepción y experiencia del paciente. A medida que la
atención centrada en el paciente hoy en día se convierte en un pilar fundamental de la
prestación de servicios de salud, el entorno físico donde se brinda esta atención juega un
papel crucial, teniendo un impacto significativo en la percepción del paciente.
La práctica arquitectónica hospitalaria está llamada a orientarse en aliviar el estrés,
promover la curación y mejorar la satisfacción general del paciente con los servicios
recibidos. Al considerar el diseño desde la perspectiva del paciente, los arquitectos
podemos crear espacios que no solo sean funcionales, sino que también ofrezcan una
experiencia de cuidado verdaderamente centrada en el ser humano.
Conclusión Es crucial reconocer la relación directa entre el entorno del paciente y su experiencia. La
arquitectura debe participar activamente en el proceso terapéutico, teniendo en cuenta la
intimidad, la dirección, la independencia y la seguridad. La integración de estas
consideraciones en la práctica arquitectónica no solo puede mejorar la calidad del centro de
salud, sino también tener un impacto positivo en la eficiencia de las instalaciones sanitarias.
Un entorno bien diseñado no solo optimiza la operación del hospital, sino que también
transforma la experiencia del paciente, promoviendo su bienestar y facilitando una
recuperación más rápida y efectiva.